¡Hola! Utilizamos cookies propias y de terceros para analizar el uso de esta web y mejorar tu experiencia de navegación. Al continuar navegando entendemos que aceptas nuestra política de cookies.    Más información - Aceptar.

Sala Bradomín

Sala 2

 

Se denomina así la sala situada en el primer piso de la torre, por ser este un espacio interesado en divulgar la etapa de consagración de don Ramón del Valle-Inclán a la estética modernista. Antiguamente esta estancia habría sido una gran sala caldeada por la chimenea parietal, de la que pende un escudo, tallado en madera, conforme aparece representado en libros suyos.

Ofrece varios paneles explicativos donde podemos consultar, de forma abreviada, una serie de informaciones contrastadas sobre los temas específicamente divulgados.

Es en este período cuando don Ramón adopta su característica imagen pública. En 1915 y 1916, Valle-Inclán, un hombre que nunca deja de reflexionar ni de fabular, solicita «rehabilitación a su favor en los títulos de Marqués del Valle y Vizconde de Veixín», a los que añade aquel eufónico de «Señor del Caramiñal», del que hacen gala él y sus discípulos. En tan noble ideal tercia décadas después el intelectual y escritor Victoriano García Martí. Proponiendo rendir un merecido tributo nacional a don Ramón y así obsequiarlo con un hogar definitivo en Galicia: la torre de Bermúdez.

«Don Manuel Bermúdez y Bolaño, mi bisabuelo, fue un caballero… Dormía mi bisabuelo en una gran sala de la torre, con un criado a la puerta, y yo le suponía lleno de remordimientos, turbado su sueño por fantasmas y aparecidos. [...] Creo que ha sido un carácter extraordinario, y así estimo sobre todas mis sangres la herencia suya [...]. Qué amorosa evocación tiene para mí aquel tiempo! ¡Dorado es tu nombre, Santa María del Caramiñal! ¡Dorada tu iglesia con nidos de golondrinas! ¡Doradas tus piedras! ¡Toda tú dorada, villa de Señorío!».

Ramón del Valle-Inclán, 1915 

Observemos el mobiliario y objetos reunidos:

Primeramente 

El mueble comedor, compuesto de mesa y sillas a juego, sobre el que se exhibe una muestra de cristalería fina, y junto a este, el sofá de esquina alto, tapizado en terciopelo estampado, procedentes de residencias familiares de don Ramón del Valle-Inclán en Madrid.

 

PINCHA SOBRE LAS MINIATURAS PARA VERLAS EN DETALLE

Por algún motivo no se a completado la carga de la galeria, pincha el botón recargar para intentarlo de nuevo.

Recargar

Seguidamente 

En la primera, el certificado de amputación de su brazo izquierdo (1899); ediciones de su segundo y tercer libro, Epitalamio (1897) y Cenizas (1899); así como esa edición especial, firmada y numerada por propia mano del escritor, de Sonatas. Memorias del Marqués de Bradomín (1928).

En la segunda, la caricatura de don Ramón ante el Morro de La Habana (1921), obra de Conrado Massaguer; el Manifiesto de los intelectuales españoles en contra de la dictadura del general Gerardo Machado (1931), o una parte testimonial de su epistolario más personal e íntimo.

 

PINCHA SOBRE LAS MINIATURAS PARA VERLAS EN DETALLE

Por algún motivo no se a completado la carga de la galeria, pincha el botón recargar para intentarlo de nuevo.

Recargar

 

Finalmente

Las obras de las bellas artes. En especial, el gravado Crepúsculo, de Ricardo Baroja, reproducido en la primera edición de Jardín Novelesco (1905); el retrato de Castro Gil (1944); los dibujos de Carlos Maside (vv.aa.); las caricaturas de Álvaro Cebreiro (1924) y Lino González Rubido (ca. 1935). Antes de abandonar esta sala, no dejemos de admirar el boceto del cartel para la representación de Águila de blasón (1966), en el Teatro Nacional María Guerrero de Madrid, obra del pintor y escenógrafo Manuel Mampaso.  La talla El marqués de Bradomín (2016), que preside esta sala, es obra del escultor Ricardo Dávila.

 

PINCHA SOBRE LAS MINIATURAS PARA VERLAS EN DETALLE

Por algún motivo no se a completado la carga de la galeria, pincha el botón recargar para intentarlo de nuevo.

Recargar